Desde la Asociación de Cultivadores de Arroz aseguran que ha habido un aumento significativo de los insumos para la próxima zafra, “tenemos una suba más del 50% en fertilizantes”, y a esto se suman otros factores como la falta de disponibilidad de contenedores, “que causó problemas para exportar e importar”, aumentado aún más los costos.
El vicepresidente de la Asociación de Cultivadores de Arroz (ACA), técnico agropecuario Juan Miguel Silva, dijo que para el arroz es difícil hacer una estimación de los costos pensando en la próxima cosecha, “porque sigue subiendo todo”. De todas formas “hay gente que está armando los presupuestos que ya están un 15% arriba” en relación a la zafra anterior.
El gremialista explicó que “el 30% de los costos nuestros son en bolsas”. Cabe precisar que el valor de la bolsa es de 12,30 dólares, un dólar por encima del año pasado. El comunicado de ACA precisó que ese valor es por la bolsa de 50 kilos de arroz sano, seco y limpio, puesto en boca de recibo.
“Por otro lado, tenemos aumento del valor del combustible de alrededor del 10%, los fertilizantes subieron mucho, más del 50%, o sea que el año pasado lo compramos a 450 dólares la tonelada y hoy vale más de 650, 680 y hasta 700 dólares la tonelada dependiendo de la fórmula”.
“Si la tonelada subió de 450 a 700 tenemos una suba del 40 o 50% y eso repercute en el costo por hectárea”, comentó.
Otro elemento a considerar es la mano de obra, aunque “los jornales no han subido en el grado que sí lo hicieron el resto” de los componentes de la ecuación.
“Yo creo que la suba de los fertilizantes y el glifosato van relacionados a la suba de commodities como la soja y otros que han incidido en esa disparada, y otro tema importante es el de los fletes internacionales que también van a incidir en el costo de los fertilizantes”.
Silva puntualizó que hay atraso en la llegada de los insumos, “es un tema de la pandemia que generó un corrimiento en la disponibilidad de contenedores, y eso causó problemas para exportar e importar”. La suba de la soja “generó un requerimiento que no estaba previsto, por ejemplo de glifosato que se va a necesitar una cantidad mayor y eso está haciendo que el precio se dispare”.
Falta agua en las represas del centro del país
Respecto a los trabajos para la próxima zafra arrocera, Silva dijo que ya hay productores que están trabajando las chacras, aprovechando un invierno favorable, pero a su vez se está “esperando la llegada de algunas lluvias para el llenado de las represas en la zona centro que están bastante bajas y le falta nivel a la laguna Merin”.
No ha motivo para creer que las represas y la Laguna no lleguen a sus niveles, “esperamos que para el momento de la simbra que comenzará entre el 20 y 25 de setiembre se pueda almacenar agua, pero el pronóstico hoy es de una primavera corta y un invierno no tan llovedor”.
Los costos de producción del arroz
Los costos de producción por hectárea del arroz de la zafra 21/22 se espera tengan un aumento de entre un 11% y 12%, comparados con la zafra anterior, básicamente impulsados por el aumento de los insumos utilizados en las chacras.
Con respecto a la zafra pasada el glifosato aumentó más de un 120%, la UREA aumentó un 50%, los fertilizantes binarios en general entre un 50 y un 60% y el potasio más del 100%. Con respecto al costo de la semilla, si bien no va a tener ningún aumento especulativo, va a sufrir el costo comercial del grano. Los insumos implicaban un 17% del costo por ha promedio en la zafra anterior, y pasarían a significar un 24% y un 25% del total de costos.
En lo que refiere a los salarios se puede estimar que aumenten en pesos al mismo ritmo que lo que aumenta el tipo de cambio. Y algo similar debería suceder con el costo de la energía eléctrica.
En relación a los costos de combustibles cabe la incertidumbre de qué pasará con el precio del petróleo que se toma como referencia para la fijación del precio de los combustibles según la nueva fórmula que ha definido el gobierno.
El sector arrocero es un sector que requiere de una fuerte inversión, permanente en el tiempo para seguir obteniendo los excelentes rendimientos que ha exhibido en los últimos años. En los últimos seis años producto de la falta de rentabilidad, el sector ha sido menguado. A pesar de ello, y considerando la mejora de precios del cereal desde hace ya un año y medio, muchos de los productores, han realizado inversiones que se espera resulte un ahorro en los costos de mantenimiento de la próxima zafra.
En términos de dólares el aumento de costos por hectárea para el cultivo para la próxima zafra se estima aumente unos USD 180 dólares superando de esta manera los USD 2.000/ha. Este nivel de costos sería el mayor de los últimos 6 años.
Fuente: https://www.lamañana.uy