Transferencias de los consumidores a toda la cadena arrocera, prácticamente nula libertad de elección y afectación para familias de más escasos recursos que son las que más consumen arroz, son algunos de los problemas que se afrontan en el país por la fijación del precio del arroz.
Desde la creación de Conarroz los gobiernos prácticamente han renovado esta fijación de manera constante, y, este mecanismo ha sido usado en nuestro territorio para mantener precios altos, según Juan Ricardo Fernández, presidente de la Asociación de Consumidores Libres.
“Siempre se ha utilizado para favorecer a los productores e industriales del arroz, no al consumidor, muy recientemente la OCDE dijo de quitar la fijación, pues el precio actual es uno de los caros del mundo”, dijo el presidente de la Asociación de Consumidores Libres.
Esta es una lucha que trae consigo muchos años de intentos, idas y vueltas, en las que se ha destacado Consumidores de Costa Rica como uno de los actores insistentes en que se libere el costo para beneficio de las familias más pobres y todos los consumidores.
El punto más cercano de hacerse realidad la liberación del precio fue entre noviembre de 2013 y febrero de 2014. No obstante, el decreto necesario sufrió dos postergaciones, y su entrada en vigencia nunca se hizo realidad.
Fuente: https://www.larepublica.net