Costa Rica: Arancel subió para importación de arroz pilado

arroz paddy

21 Enero. «Arancel subió para importación de arroz pilado: Liberalización inmediata del arroz mataría 60.000 mil empleos en las zonas más pobres del país». El aumento del arancel a la importación de arroz desde el Cono Sur por cuatro años, le dará una última oportunidad a la producción nacional para mejorar sus rendimientos y bajar sus precios.

Cerca de 60.000 empleos en las zonas más pobres del país se escudan detrás del incremento al arancel que estableció el Ministerio de Economía Industria y Comercio (MEIC) a la importación de arroz pilado de algunos destinos de América del Sur, como Argentina y Uruguay.

Los críticos de la producción nacional aseguran que una liberalización en la importación de arroz permitiría bajar sustancialmente los precios al consumidor de este grano. Los arroceros lo reconocen, pero afirman que hay mucho más en juego.

Tanto autoridades como productores nacionales aseguran que se están jugando su “última oportunidad” con el incremento del 35% al 62% en el arancel de importación de arroz, pues la medida tendrá una vigencia de cuatro años, durante la cual los rendimientos en la producción arrocera deben mejorar.

El viceministro de Economía, Isaac Castro, justifica la medida en un estudio que realizó el MEIC para responder a la solicitud que hicieron los industriales que procesan arroz en el año 2013, y que fue entregado por la Dirección de Defensa Comercial el pasado 9 de diciembre.

El informe reúne los argumentos de los sectores interesados en el tema: los productores e industriales del arroz, Conarroz, Consumidores de Costa Rica y los importadores de grano pilado (limpio y listo para consumo) que en los últimos tiempos han traído grandes cantidades de arroz uruguayo y argentino al mercado nacional.

Según los datos de este informe, se determinó una tendencia creciente en las importaciones de arroz pilado desde “terceros países” (que no forman parte del TLC entre Centroamérica y Estados Unidos u otros acuerdos comerciales que tiene el país).

En 2012, Costa Rica importó desde Uruguay 1.320 toneladas de arroz y para el 2013 la cantidad se incrementó hasta las 6.680 toneladas, mientras que desde Argentina las importaciones pasaron de 2.939 toneladas a 8.468.

El MEIC consideró que, con la documentación aportada, la industria arrocera nacional ha sufrido un deterioro en los últimos tres años, tanto en sus ventas como en su capacidad instalada, relacionada con este incremento en las importaciones.

“La producción de arroz pilado disminuye en el 2012 en un  7,45%; mientras que para el 2013 presenta un decrecimiento de 0,67%. Por su parte, las ventas experimentan una caída de 12,76% en  el año 2012 y para el año 2013 se recuperan (5,51%) sin alcanzar el  nivel mostrado en el 2011”, dice el informe.

El viceministro Castro asegura que el análisis realizado permite determinar una “amenaza de daño grave” a la producción nacional, por lo que la medida pretende proteger la producción nacional y los empleos que genera en todo el país.
“Un ingreso masivo de arroz pilado al mercado nacional puede hacer que la industria deje de moler arroz en granza (con cáscara) y eso provoca una amenaza grave, pues todo el aparato industrial deje de operar y que no hay quién le compre el arroz en granza a los productores nacionales”, explicó Castro.

Castro indicó que la normativa de la Organización Mundial de Comercio (OMC) permite establecer este tipo de medidas temporales, para permitir un reajuste del sector arrocero nacional.

Paralelo a la salvaguarda, los arroceros junto al Ministerio de Agricultura deberán emprender un proceso de mejora de sus rendimientos que actualmente están en un promedio de 3,8 toneladas por hectárea, cuando el promedio mundial está por encima de las 6 toneladas por hectárea.

En el Plan Nacional de Desarrollo se establece una meta gradual de incremento en la productividad, que para el año 2018 debe llegar a un promedio de 5,2 toneladas por hectárea.

“Una liberalización inmediata de la importación de arroz puede traerse abajo a todo un sector que genera empleo e ingresos en las zonas rurales y tenemos evidencias de que, no necesariamente, tener importaciones baratas se va a traducir en mejores precios para el consumidor. Estamos trabajando para reducir la brecha entre el precio local y el internacional”, comentó Castro.

El viceministro aseguró que junto a la salvaguarda ya se hizo una solicitud para revisar el precio al consumidor del arroz y reducirlo en un 4% y se modifican los precios mínimos establecidos para cada calidad de arroz con el fin de que un arroz de mayor calidad no vaya a costar menos que uno de calidad inferior, salvo en el segmento de arroz con 95% grano entero donde se dejará un margen para libre competencia.

Fuente: http://www.semanariouniversidad.ucr.cr/