05 diciembre. Los arroceros del país le solicitaron al Gobierno Nacional revisar el Tratado de Libre Comercio, TLC, con los Estados Unidos, y el acuerdo Comunidad Andina, CAN, con el Ecuador. La razón: se debe proteger la producción nacional.
Con relación al TLC con los EE.UU., Rafael Hernández Lozano, gerente de la Federación Nacional de Arroceros, Fedearroz, estimó que el arancel del 80 % se debe mantener 10 años más, teniendo en cuenta que en el país arrocero no hay condiciones de competitividad.
Frente a la CAN dijo que es un acuerdo comercial que viene desde hace 40 años, cuando Colombia abastecía a Ecuador y Perú; ahora, es todo lo contrario y las condiciones han cambiado del cielo a la tierra.
“Está funcionando, pero de allá para acá. En estos momentos el arroz de ese país está mucho más costoso, lo que a todas luces del tratado deberían comprarnos; pero uno no entiende como quieren mandarnos”, agregó.
Raras operaciones
Hernández Lozano dijo que no entiende a los importadores
colombianos quienes compran arroz costosos en Ecuador y pretenden ingresarlo al país más barato.
“Una tonelada en Ecuador puede valer entre $2.2 millones y $2.4 millones; mientras que en Colombia se tasa a $1.8 millones. El Ministerio de Agricultura le solicito a la Dian y la Fiscalía que investigue que hay detrás de todas esas transacciones”, aseveró.
El punto más sensible del TLC con EE.UU. es la ventaja que tienen los agricultores de ese país frente a los nuestros. No se les puede competir porque ellos tienen garantías de precios, subsidios, tecnología, maquinaria, crédito y protección estatal.
“Ese producto, indudablemente, llega más barato a Colombia; de ahí que se trabaje con el Amtec para bajar los costos y subir producción y así, poder competir con EE.UU.”, agregó.
Cosecha venidera
Hernández Lozano dijo que para II semestre de 2017 se tienen sembradas aproximadamente 150 mil hectáreas, cifra muy baja frente al mismo periodo de 2016. “El precio fue el que llevó a que las siembras bajaran. Muchos arroceros se quebraron”, agregó.
Fuente: http://www.vanguardia.com