Brasil elimina los aranceles sobre el arroz importado ante subida del precio

El aumento del precio de los alimentos ha sido responsable por el 80 % de la inflación acumulada del año en Brasil, que llegó al 0.70 %, de acuerdo con los datos divulgados este miércoles por el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).

El precio de los alimentos básicos se ha disparado en Brasil presionado por el fuerte aumento de la demanda en el mercado externo y la escalada del dólar, un alza que golpea principalmente el bolsillo de las clases más desfavorecidas y castigadas por la crisis del nuevo coronaviurs.

El precio del arroz y del fríjol, dos de los principales alimentos en la dieta de los brasileños, ha escalado más de un 20 % en lo que va de año, en momentos en los que el país enfrenta una grave crisis económica y social por la pandemia.

El aumento del precio de los alimentos ha sido responsable por el 80 % de la inflación acumulada del año en Brasil, que llegó al 0,70 %, de acuerdo con los datos divulgados este miércoles por el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).

El valor de las materias primas trepó durante el comienzo de la pandemia obedeciendo a la ley de la oferta y la demanda. La crisis sanitaria provocó un fuerte incremento de las compras externas, mientras que algunos países optaron por restringir la oferta para garantizar el abastecimiento interno.

Pero en Brasil se sumó un factor clave: la devaluación del real. La depreciación de cerca del 40 % de la moneda brasileña ha atraído compradores y alentado a los productores agrícolas a apostar por las exportaciones, en detrimento de la venta en el mercado interno.

«El alza del dólar hizo que los exportadores de arroz, soja, carnes, café y azúcar, pasaran a tener en el exterior una ventaja muy grande en el término de precios y comenzaran a cobrar internamente un precio más alto. Destinaron a la exportación una parcela mayor, reduciendo la oferta interna», explicó a Efe Mauro Rochlin, economista del centro de estudios Fundaao Getulio Vargas (FGV).

En el caso del arroz, la caída en picado del real hizo prácticamente inviable las importaciones del producto por parte del Mercosur, bloque que junto a Brasil integran Paraguay, Uruguay y Argentina y que tradicionalmente envía sus estoques al país sudamericano.

A ello se suma la retracción de la oferta de la materia prima por parte de los productores, pese a estar en plena cosecha, con un 58 % del área recolectada, de acuerdo con la Asociación Brasileña de la Industria de Arroz (Abirroz).

El Gobierno brasileño ha descartado un posible desabastecimiento en el mercado interno y confía en la súper cosecha que se espera para el próximo año, cuando está prevista una producción de 12 millones de toneladas, un incremento del 7,2 % con respecto a la anterior.

De acuerdo con el Ministerio de Agricultura, la próxima cosecha, que comenzará a ser comercializada en marzo de 2021, producirá un alivio en el precio del arroz, un alimento del que cada brasileño consume una media de 34 kilos por año.

Pero los especialistas creen que la bajada del precio será difícil mientras el dólar continúe en niveles históricos en Brasil, especialmente porque el Gobierno no tiene condiciones de controlar un cambio volátil.

Fuente: https://www.eleconomista.net