14 Noviembre. El pasado jueves 6 de noviembre, en su reunión plenaria, la Cámara de Industrias Arroceras de Argentina (C.I.A.E.R.) definió las nuevas autoridades que serán convalidadas en la próxima Asamblea. El flamante presidente en esta etapa es el Ing. Federico Gadea, quien a su vez e presidente de la empresa Insumos y Cía S.A.
Esta renovación institucional se realiza en un momento muy preocupante para la industria arrocera y para toda la cadena.
Si bien Argentina tuvo un primer semestre con buen volumen de exportación de arroz y precios que acompañaron el incremento de los costos, el segundo semestre viene con valores diametralmente opuestos. Hoy no existen posibilidades concretas de mantener el ritmo de exportación, dado que la competitividad del sector no se pudo mantener por los cambios en las variables antes mencionadas. Todos los costos se han incrementado, y lo valores que se obtienen por exportaciones son iguales o menores que en el primer tramo del año. La consecuencia, es que la materia prima adquirida a los productores en la cosecha, se comercializa a pérdida sólo con el fin de cubrir parte de los cotos fijos.
De hecho, los meses de septiembre y octubre fueron los de menor elaboración a nivel país de los últimos 10 años, teniendo industrias paradas por completo, y realizando un esfuerzo enorme por mantener todas las estructuras de personal.
Gadea indica que “las perspectivas para lo que resta del año y la próxima campaña 14/15, son realmente preocupantes. La industria solicitará audiencias a nivel provincial y nacional, para poder encontrar una solución a esta dramática situación de crisis del sector que amenaza con parecerse a las vividas hace algunos años».
Es imperioso contar con la comprensión y con acciones inmediatas del estado para sostener esta cadena de valor que exporta las dos terceras partes de lo que produce, y que con estas perspectivas se enfrenta a desinversión, caída de actividad y a la desaparición de algunos de sus actores con la consecuente pérdida de mano de obra directa e indirecta.
La mayor cantidad de personas que trabajan en la cadena arrocera se encuentran en la actividad industrial y de servicios indirectos, con lo cual la falta de rentabilidad en este eslabón es una preocupación compartida por empresarios y empleados por igual.
La cadena de valor del arroz integra a productores agropecuarios, industria molinera, y un conocimiento del negocio de exportación dentro de las propias estructuras de las empresas. Además fortalece la actividad de contratistas rurales y de la industria, transportistas, y proveedores diversos. El entramado productivo del arroz se fortalece con actividades de investigación de Inta y de la fundación Proarroz, contribuyendo con tecnología en semillas y de manejo.
Fuente: www.rutadearroz.com